viernes, 12 de julio de 2019

Historia de Tous (Valencia). Capitulo 12º. Un Pueblo Bajo Las Aguas.






HISTORIA DE TOUS



Un pueblo bajo las aguas

Mª. Carmen Chorda Domenech





            Deposito Legal: MA 687 – 16 – 2016.

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CAPITULO XII.- EDAD MODERNA


EDAD MODERNA
   En 1837 montes que aparecen como comunales o de propios se encuentran en Tous, Montesc, Vallada,…. Olocau.
   Algunos podían ser de propiedad señorial pero se convirtieron en públicos si los propietarios no los reclamaban.
   Realengo era el monte de la Garrofera, dividido entre los pueblos de Guadassmar y Alcira, reclamado sistemáticamente por la Bailía del Real Patrimonio.
   Desde 1834 y por iniciativa del alcalde de Guadassmar y el vecino de Alcira no reconocen el dominio directo de la corona sobre los montes realengos que compartían.
   Los municipios basan sus demandas en un antiguo privilegio real dado en Agosto de 1249, que a su entender hacían donación a los habitantes de la jurisdicción de Alcira.
   Alegan que la mayoría de los terrenos montuosos corresponden al común de los vecinos, excepto pequeños trozos de dicho terreno que pertenece a particulares.
   En Noviembre de 1856 el Baile General de Patrimonio, presento documentos que acreditaban la posesión en que se encuentra la reina como en pleno dominio de los referidos montes refiere que el Realengo es un extenso territorio de más de 17.000 hanegadas de tierra dadas en ENFITEUSIS (derecho real que supone la cesión temporal del dominio útil de un inmueble a cambio del pago de un canon, el dominio directo es del propietario y el útil es de la persona que usa y aprovecha la finca) por el Real Patrimonio a diferentes particulares.
   Retaba a los pueblos implicados a que presentaran documentos que demuestren lo contrario.
   En 1857 Guadassmar y Alcira de forma  conjunta presentan alegaciones.
-       Privilegio de 1249.
-       Consideran que el derecho a establecer no es más que la suprema potestad de los Reyes en los territorios conquistados y de dueño no conocido.
   Consideran con esto que se reconoce el Real Patrimonio un dominio condicional sobre los terrenos en cuestión, dominio que no debe afectar a los aprovechamientos y servidumbres rusticas de los montes, de lo contrario perjudicarían a un número de familias que no tienen otra subsistencia que el jornal que lo produce la corta de leñas bajas que emplean para fabricar cal y usos domésticos.
   Recuerdan que en 1753 el monarca concede a uno de sus funcionarios, Diego Huidobro, los derechos que hasta entonces disfrutaba la corona, sobre el herbaje del término, así como los derechos de peso y romana y almodiaje, cesión que había caducado con las leyes de abolición de señoríos, revirtiendo en consecuencia los aprovechamientos en cuestión sobre los municipios.
   Oídos ambos litigantes el Consejo Provincial y el Gobernador Civil fallan a favor de los pueblos, aunque se reserva al Real Patrimonio la facultad de acudir a los tribunales de justicia para dirimir la propiedad de los montes. La resolución dictada solo afectaba al aprovechamiento.
   El Real Patrimonio continúo concediendo establecimientos enfitéuticos.
   La clasificación de Montes de 1859, vino a alterar los términos del litigio al catalogar la Garrofera como enajenable (es decir la propiedad se puede transferir a otro).
   Se inicia un proceso de venta del monte de la Garrofera, con sus 3382 hanegadas de monte bajo, 2000 pimpollos carrascos, 120 algarrobos y cuatro hornos de cal, y así pues fue sacado a subasta el 30 - 10 - 1860 un hacendado y ganadero de Alcira, Gregorio Aparici y Guas, consorciados con varios vecinos de Valencia oferto 210.000 reales y se lo adjudico. Cuando estos pretendieron tomar posesión del monte, les resulto imposible. El monte se hallaba parcelado en más de 500 supuestas propiedades. Se trataba de antiguos enfiteutas del Real patrimonio. Su titulo era la posesión de un dominio útil durante generaciones, con frecuencia su origen era una usurpación que tras ser reconocida por la Bailía, quedaba como establecimiento enfitéutico.
   Que sucedió, pues que el Real Patrimonio había promovido un expediente de venta del monte Garrofera, a la vez que los enfiteutas, antes díscolos a la hora de reconocer el dominio directo de la corona, pasan a reconocer el derecho del Real Patrimonio para no ser despojados por los nuevos compradores.
   Las palabras de un enfiteuta de Tous que poseía en la Garrofera las tierras que usufructuaba lo subrayan. “En otros puntos le dice al Baile Alcireño, se opondrían a ser enfiteutas, en este punto han reconocido y reconocen derechos indiscutibles, cual consta lo han hecho todos los antepasados”.
   En el caso del monte de la Garrofera, el campesino enfiteuta de Alcira, Guadasuar, Tous, Alberique y L´Alcudia consiguió sus objetivos.
   Los rematantes en vista de todo esto renuncian a su posesión y reclaman al Estado la devolución del precio pagado.
   Un buen numero de enfiteutas consiguió mantener el usufructo de sus parcelas aunque hubieron de reconocer los débitos que impago de censos tenían en el Real patrimonio. 
   Pero pronto surge una nueva amenaza cuando en 1865 el Real Patrimonio inicia una desamortización (hace posible la venta de bienes pertenecientes a manos muertas,  o entidades que lo pueden vender como Iglesia, Nobleza, Corona etc...).
   Los enfiteutas no tuvieron más remedio que aceptar lo que desde 1834 pretendían negar: el dominio directo de la Corona sobre sus tierras.
   Así pues la burguesía que en 1860 habían perdido una oportunidad. Pues muchos son los pueblos que por temor a perder sus aprovechamientos comunales llegaron a acuerdos con sus antiguos señores.
   Ya en el país valenciano a partir de la entrada en vigor de la Ley General de Desamortización de 1855; habían llegado a acuerdos.
Antella y Favareta con el conde de Rotova.
Olocan, Marines, Tous y Pueblo Nuevo con el conde de Olocau.
   Por lo general el antiguo señor se reserva el derecho de la titularidad de los mismos.
   Los pueblos o algunos prominentes vecinos, continúan disfrutando de determinados aprovechamientos, se repartían las ganancias con el ex señor o entraban como administradores de la nueva finca privada de este.

GESTION MUNICIPAL MONTES PUBLICOS
   El monte nº 80 del catalogo de la provincia de Valencia, denominado “Macho Blanco” fue incluido en las primeras clasificaciones con el nombre de Alto de Tous y Cela.
   El monte público del término de Tous incluido en la calificación de 1859 bajo las denominaciones de “Cuarto bajo”, “Cuarto de Varones”, “Matamon”, “La Pasita” y “La Romana”.
   Sin motivo aparente este monte dejo de figurar en el catalogo de 1862, lo que a juicio del ingeniero que redacta la memoria descriptiva del monte de 1880 – 1881 obedecía a que la parcela del monte titulada “Cuarto bajo” fue excluida de monte público por pertenecer al Señor Territorial Conde de Olocan.
   El monte de Tous, en la memoria de 1880 – 1881 consta que se viene considerando como de pertenencia municipal.
   Es significativa la falta de consenso del pueblo acerca de la  pertenencia del monte, quizá por intereses de determinados grupos del vecindario.
   Además se acredita el origen y la titularidad del predio por haber sido este objeto de Adquisición al conde de Olocan mediante escritura pública de redención del señorío pocos años antes.
   La perdida de carácter comunal de determinados montes valencianos, en ocasiones adquiridos por sufragio colectivo del pueblo mediante escrituras de redención  de derechos señoriales o de compra venta al antiguo titular del señorío.
   La propiedad del monte de Tous, se accede al pueblo por este cauce.

NOTICIAS DE TOUS.
   1521. Los agermanados cometieron ingentes y atroces tropelías, pero ninguno de estos igualo a los cometidos en Anna, Sumacarcer, Tous, Bicorp, Navarres en las que el capitán Eojas, con 200 hombres de Xátiva los saqueo y quemo sin misericordia alguna. Sin otro objeto que saquear y robar.
   Expulsión de los moriscos.
   El puerto de Denia y el destierro morisco (1609 – 1610), Manuel Lomas Cortes.
   Las poblaciones elegidas para ser transportadas por cuenta real son Alberique, Atasques, Gabarda. A estas poblaciones debían unirse también las Aljamas próximas geográficamente, así pues a mediados de octubre los habitantes de Antella, Massalavés y Tous se dirigieron a Denia para embarcarse.
   A bordo de 16 galeras de Nápoles se habían acomodado un total de 3.531 moriscos.
   Mahomat Alcay, sarraceno lugar de Tous, juez del lugar.
   A la 1ª dotación de parroquias valencianas, vehículos de repoblación y cristianización, por parte de Jaime I, hay que sumar en los siglos XIV – XV la de San Miguel de Tous en 1347.
   Beato Salvador Estrugo Solbes, Ordenado en 1588 fue coadjutor de Tous, Guadasuar….

POR EL JUCAR
(Notas y apuntes de viaje: Eduardo Soler y Pérez editado por Pilar Carmona).





   Durante la Edad de Bronce se identifica, con numerosos poblados dispersos que se extienden desde Alberiq hacia las montañas de Tous y que naturalmente aprovechan las cuevas hacia el interior.
   Se implanta durante la época islámica (VIII – XIII) poblados en torno al cañón del Júcar dedicados al aprovechamiento ganadero y forestal. Se implantan un sistema defensivo a lo largo del río con castillos, torres vigías y fortificaciones de las que dependen numerosas alquerías, Alberic, Carcer y penetran en el angos Tous y Cofrentes.
   Los emplazamientos defensivos, espectaculares e insólitas en torno al Júcar, situados sobre desfiladeros, acantilaos, cerros (castillo de Tous, Terrabona, castillo de Millares…).
   Tras la conquista Cristiana sigo XIII la región del cañón del Júcar poblada por mudéjares, forzados a convertirse en 1525.
   A finales del siglo XVI – XVII en Tous y Terrabona hay 130 cats de moriscos.
   La expulsión produjo el abandono de casas y tierras convertidas en eriales. La consecuencia fue una gran crisis económica de los señores. Pese a los intentos de repoblación algunos lugares quedaran definitivamente deshabilitados.

FLORIDABLANCA. POBLACION DE TOUS
   Tras la conquista cristiana la región del caño del Júcar estaba poblada casi exclusivamente por mudéjares. Forzados a convertirse en 1525. En Tous y Terrabona había 130 casas.
   Según el censo de Floridablanca de 1787, la población era de 1.175 en Tous.
       Población Tous         2004         1900         1787

                                          1117         1659         1175

   En 1866 en Tous se contabilizaron 300 cabezas de ganado lanar y 3.000 de ganado cabrío.
   La agricultura es de secano, centrada en el algarrobo, olivo y la vid, se completaba con la explotación del monte (carbón, leña, cal, etc.).  También importante el esparto.
   Las huertas de Tous se regaban con muchas fuentes que allí nacen, en Tous además con aguas de la acequia de Escalona, cultivaban moreras, trigo, maíz, cebada, algarrobas.
   La comunicación entre los pueblos del Júcar es a veces muy desfavorable y con caminos intransitables, constituidos por veredas de ganado y vías de arrieros, caminos empedrados adaptados a la orografía, ascendiendo a las muelas y lomas por donde el trayecto es más fácil para descender hasta el punto habitado. La fuerte cuesta a la salida de Tous en dirección a Millares asciende por una arista entre ríos Júcar y Escalona, para superar un desnivel de más de 200 metros.
   Por estos caminos de herradura no es posible desplazarse en carros, el transporte era conducido por arrieros, oficio que sobresale entre los moriscos, quienes utilizaban el mulo.
   En el trayecto desde Tous y Millares se tardaba unas 5 horas.
   La inaccesibilidad se veía acentuada por la escasez de pasos para cruzar el río. El Júcar era un río de pasos de barca.
   El mercado en estas poblaciones apenas existe, la carne común es la de los animales de pasto, se sustituye a menudo por las aves de corral o el jamón y embutidos.
   Las casas presentan pocas comodidades.
   El clima es seco, con calor y frío optimo para el cultivo del algarrobo o garrofero y la higuera.
   El camino de Antella hacia Tous es fatigoso, una cuesta la más larga que remata una loma y desciende inclinándose hacia el río y en la margen izquierda aparece el pueblo de Tous. La cuesta de unos 30 metros. Garrafales de importancia y huertas en la parte más baja de la ladera, donde es accesible el riego con moreras.
   Tous situado en un recodo del río, el horizonte limitado por las montañas. Sus calles empinadísimas y más largas las perpendiculares hallándose empedradas todas con guijarros, sin esquinas, bastante grandes para ocasionar molestias. Las casas vistas a distancia semejan escalones por la pendiente en la que están cimentadas y de cerca falta de balcones en su mayoría, sin más piso alto que el desván.
   Una casa que por su mayor fachada y gran zaguán se dice ser casa señorial.
   Una riada en 1898 destruyo los edificios antiguos contiguos a la iglesia así como las casas situadas a lo largo de la orilla. De 107 casas entonces derruidas, ninguna se volvió a edificar. Arraso muchos municipios, en la población de Tous de poco mas de 300 casas que lo formaban 107 han sido arruinadas, muchas de ellas imposible reconocer su emplazamiento, pues el agua se llevo no solamente materiales que las constituían, sino hasta los cimientos y la tierra.
   En la riada de 1898 se llevo un puente colgante. Desde esta fecha el paso del río se hace por barca. En tiempos más antiguos debió de haber un puente de sillería y mampostería emplazada más arriba del caserío, quedo uno de los estribos que llaman el Pontón.
   El termino de Tous es extensísimo, casi todo compuesto de secanos abancalados o en terrazas. Las cuestas dominan. Las garrofas y la uva de vino, son la principal riqueza y las numerosas e incultivadas lomas donde pastan cabras cuya carne se consume en el pueblo, de inferior calidad a la leche,  excelente y substanciosa como las plantas leñosas de que procede, suministran mucho carbón vegetal.
   Con el transporte de estos productos a la Ribera o con el esparto que llevan a Millares viven muchos  de los habitantes.
   A los toueros se les encuentra especialmente en días de mercado a fiesta de Alberique, Carlet o en Alcira vendiendo garrofas, carbón.
   La inclemencia del invierno no les detiene. Grandes madrugadores, salen por tortuosos caminos hacia los pueblos de la Ribera, venden su carga y regresan a su casa con arroz, hortalizas u otros artículos, buscando el descanso tan honradamente ganado, en las primeras horas de la noche.
   Esta corriente mercantil entre la Ribera y los de Tous, no es suficiente para borrar las diferencias de carácter de los individuos, sus costumbres o el concepto que tienen unos de otros.
   El touero y su aislamiento vive en un medio social atrasado, pobre en fertilidad y rico en gastos para su explotación.
   Son sobrios, económicos, menos sociables y desconfiados con los del exterior, a su vez son resistentes, nobles hasta en el habla pues utilizan el castellano.
   Además carecen de muchas comodidades.
   Hasta el río es hostil, tienen que utilizar una barca de paso, destrucción del caserío por inundaciones, así como los diferentes puentes destruidos.
   Añadimos a esto el descuido de los servicios municipales. No hay fuentes públicas. El agua de beber ha de buscarse bastante más arriba del caserío en dos fuentes separadas.
   El pescado rara vez llega al pueblo. El más frecuente es el del río. Las aves de río son poco numerosas.
   No hay posada en este pueblo. El único acomodo se encuentra en la casa de “Cándida” excelente mujer que con su marido procura atender a los viajeros en lo que pueden.
   Han variado las costumbres desde finales del siglo XVIII en lo que Cabanilles notaba las partidas de ladrones que corrían por cerca de Tous y que los toueros no les dejaban llegar a su pueblo.
   Lo más extraño de este pueblo es oír hablar en castellano mezclando voces desusadas ya y de otras valencianas que se castellanizaron algo. Así dicen “cogello”, “matallo”, vocablos viejos que encontramos en el Quijote y en obras aun mas anteriores.
   (El médico de Tous en 1904: Lino Márquez).
   En Tous se cuenta por pesos o libras en vez del duro.
   Esto es así porque en Tous se comprueba la existencia de cristianos viejos.
   Después de la expulsión de los moriscos en 1611 y siguientes estos lugares quedan despoblados, se repoblaron con familias venidas de Aragón o Castilla. Los apellidos más numerosos son Doménech, Martorell.
   Conflicto nacional. Moriscos y cristianos viejos en Valencia. Tulio Halperin Donghi.
Los moriscos (cristianos nuevos) en contraposición a los cristianos viejos.
   Hasta 1609 un tercio de la población tiene un nombre preciso “Cristianos nuevos de moros del reino de Valencia”. Cristianos desde que en 1519 – 1521 los rebeldes agermanados los hacen escoger entre conversión o muerte.
   En el transcurso del siglo XVI en todo el reino se comercia más con vino.
   En el Archivo del reino, Archivo real, las actas de las reuniones del brazo militar (señorial) de las Cortes Valencianas se refleja el punto de vista de los señores, vinculados por sus intereses a los moriscos.
   En este siglo es un triunfo la introducción del cultivo de la viña,  así como el de la morera, y hará el modus vivendi a lo largo de las poblaciones del Júcar.
   Grandes majadas de miles de cabezas llegan del Sur de Aragón, de Albarracín, de Mora de Rubielos. Los pastizales es fuente de ingreso para el señor territorial y figura por lo tanto en las entradas de la administración señorial Tous y Terrabona (1581. ARV. MR. Leg. 475. C. 9799).
   El moreral avanza ante todo en el valle del Júcar.
   Poco a poco la arisca nobleza valenciana se va acostumbrando a modos de vivir más apacibles, en la capital se empiezan a construir casas y palacios de nobles.
   Censal: Préstamo hipotecario.
   Se producen los arriendos que no incluían los derechos señoriales, en general el señor arrienda los lugares. A la antigua organización señorial que dejaba en manos de labriegos trozos de tierra a cambio de parte de los frutos o de servicios en dineros. Suceden los arrendadores en una explotación directa.

BIENES COMUNALES
   (Propiedad, Arraigo y Apropiación. José A. Piqueras Arenas. Coordinador. Autores: Imilay Balboa Navarro y 9 más).
   Pugna por el comunal de los litigios que los municipios emprendieron ante los tribunales durante la transición del señorío a la propiedad burguesa cuando antiguos señores pretender incluir aquellos en los dominios territoriales que la generosa disposición de 26-8-1837 y la jurisprudencia subsiguiente les había confirmado.
   La desposesión de tierras y derechos comunales se practica en el S. XIX mediante procedimientos diversos.
   Enajenación de propios y baldíos durante la Guerra de la Independencia para atender gastos de los ejércitos.
   Decreto Cortes de Cádiz 4-1-1813.
  Decreto 6-3-1834 legalizando las ventas y ocupaciones bienes municipales.
Ley 1-5-1855 ley de desamortización.
   1859. Clasificación de montes enajenables y no enajenables con la venta de los primeros y la legislación  de roturaciones por disposición de 10-6-1897.
   Asentamiento de colonos sobre baldíos y comunes por la Ley de Colonización de 1907.
   Decreto 1-12-1923 amplio y confirmo la propiedad sobre roturaciones sobre montes comunes efectuadas en las 2 décadas anteriores.
   En numerosos lugares de solariegos, los antiguos señores, en los litigios por el reconocimiento de sus feudos como “señoríos territoriales”, incluyeron montes, eriales y hasta dehesas, bienes que consideraron parte integrante de la propiedad dominical sobre la cual el común de vecinos había dispuesto del usufructo a titulo gracioso sin generarse servidumbre por ello.
   En el país valenciano el conflicto sigue la siguiente frecuencia.
   Cese del pago de las rentas en 1811 (a veces desde 1808) y abolición de privilegios  sobre montes y aguas demandadas en la Audiencia en 1813 para dilucidar la naturaleza de los señoríos, conforme el decreto de 6-8-1811, recuperación parcial y con dificultades por la nobleza de los derechos señoriales en 1814, cese de nuevo en 1820 y nueva recuperación en 1823 más o menos como en el resto del país.
   9/1835. La Junta de Gobierno del reino de Valencia decreto el cese de los derechos de los señoríos comprendidos en la capitanía general y desde entonces buen número de vasallos y municipios dejaron de satisfacer cargas, rentas y deudas, indistintamente de lo que establecieron las leyes nacionales. Sumándose otros pueblos y vasallos en 1838.
   Los antiguos titulares acudieron a los tribunales de justicia a partir de la ley de 1837 e igual hicieron algunos municipios para preservar montes y otros comunales.
   Después de largos procesos, las sentencias de la Audiencia entre los años 1850-1870 y los fallos del Tribunal Supremo reconocieron el carácter territorial de los señoríos valencianos.
   Los campesinos, censatarios y arrendadores negaron los atrasos y se mostraron reacios a reanudar los pagos y a reconocer la propiedad de los antiguos señores sobre, tierras, casas, montes, molinos, canteras, etc.
   A los administradores ex señoriales se les presenta dos alternativas, emprender un procedimiento de ejecución de sentencia o buscar un acuerdo entre las partes. El estado de quiebra de los señoríos causado por la pérdida de ingresos producidos a partir de 1835., abono la segunda opción.
   Así pues se hicieron frecuentes las concordias cuya ejecución final se realizaba en común o de forma individual.
   Las concordias era una suerte de acuerdo privado de indemnización entre señores y vasallos por la concentración de las cargas o bienes que las sentencias reconocían a los antiguos señores. Se celebran ante notario en presencia de los representantes de de los antiguos señores y de los municipios o conjunto de vecinos. Aquí se consuma la liquidación de los señoríos valencianos y de paso la transferencia de una parte de los bienes comunales a manos privadas.
   Memoria de la Comisión provincial de valencia, al llegar  a la sección de cuestionario oficial sobre bienes comunales afirma que no existían propiamente en la provincia, aunque si había servidumbre sobre gastos y leñas bajas en los montes… Más adelante en las informaciones locales adjuntas a las memorias varios municipios reconocen poseer bienes co9munales. Los catálogos de calificación de montes públicos informan de bastantes más. En los municipios referidos el aprovechamiento era directo o por subasta       .
   A tenor de esto entre 1891 y 1931 fueron sembrados de cereales y leguminosas muchas hectáreas en su mayoría de montes y en menor escala de viñedos.


CASTILLOS DE FRONTERA
   Los castillos situados en primera línea de frontera, en las comarcas limítrofes con Castilla, se utilizaban como defensas de la retaguardia que protegían el sur y sureste de Valencia.
   El conjunto de Torres y fortificaciones debía de estar en condiciones de resistir asedios, y contrarrestar cualquier cabalgada que penetrase camino de Alcira o Valencia.
   La mayor parte de los núcleos fortificados estaba en manos de la nobleza. Sobre todo los ubicados en la ribera Alta y que constituían una barrera defensiva. Estos estaban situados en la Vall de Ayora, Canal de Navarres en la Zona Norte (Tous – Montroy).
   Por ejemplo:
        Llombay           Aymerich de Centelles.
        Carlet                Galceran de Castellvi.
        Alcudia             Manuel de Montagut.
        Sumacarcer       Isabel Pardo casada con Guillen Galceran de la Serra.
        Antella              Joan de Cervato.
        Sallent              Francesc Soler.

   Todas estas fortificaciones, entre otras, fueron visitadas en 1429 cuando estallo la guerra con Castilla.
   Las correrías castellanas de 1430 llegan a penetrar en las tierras meridionales de la ribera Alta tomando Antella y saqueando Carlet, L´Alcudia, Alberique y Resalany.
   Castell,  Torres y fortificaciones en la ribera Alta – Antoni Furió – Joseph Aparisi.
   Según estos autores en la Vall de Tous se localizan los siguientes elementos.
El Miscalet de Escalona.

La Torreta de Terrabona.

El Castillo de Tous.

El Castillo de la Atalaya.

   Las cuatro fortificaciones en manos de Jaime I, tras la conquista de Xátiva a cuya gobernación pertenecían y después de sublevarse y someterse de nuevo fueron donadas a Alfonso de Montagut.
   Sin embargo existen dudas de los señores efectivos, dado que poco tiempo después parece que fueron cedidos por el rey a Pero Zapata.
   28.6.1919. Información del crimen cometido en las inmediaciones de Tous y del que fueron víctimas el alcalde de dicho pueblo y su hijo.
   Cuando el alcalde y su hijo acompañados de un guarda jurado, montados en caballerías llegaron a la Cuesta de la Mujer y en un recodo del camino de improviso sonó un disparo y cayó muerto el alcalde, su hijo retrocedió para buscar a su padre y entonces sonó otra detonación y el hijo cayó muerto según relato del guarda.
   Algunos atribuyen el crimen a un rodero que merodea hace tiempo por aquellos lugares y que en otra ocasión intento matar a D. Ricardo Requena, suegro del alcalde.
   El hijo del alcalde y la hija estudiaban magisterio.

   LOS 50 CENTIMOS DE TOUS.







   Estos billetes corresponden a la primera y única emisión de Tous que fue aprobada el 1-7-37.
      La tirada fue de 2000 billetes por un valor de l000 pesetas.
      Lleva un sello tampón violeta rectangular con la leyenda “Consejo Municipal- Hacienda- Tous “en el reverso.

LOS PUEBLOS BAJO LAS AGUAS
   Las Provincias
   Los habitantes de Tous viejo, fueron cobrando las indemnizaciones por la expropiación de casas y tierras. Las casas en 1969 se valoraron a 800 pts., metro cuadrado; 450 las cambras y cámaras y 400 las cuadras y dependencias del ganado.
      Los que nacieron en aquel pueblo de empinadas y empedradas calles por las que únicamente los machos y burros acarreaban cosechas y enseres. El nuevo emplazamiento queda definitivamente compuesto por 274 viviendas de empresarios, 106 de obreros y 23 de comerciantes.

   PROYECTO PRESA DE TOUS
   Virginia Hierves Salas.
      Las obras comenzaron en 1958. Los problemas de cimentación surgieron en la zona central al encontrarse una falla geológica de grandes dimensiones que motivo su paralización en 1964.
      Se reanudo la construcción en 1974, terminando este en 1978. En 1982 el nivel del embalse supero la cuota de coronación lo que provoco la erosión del cuerpo central y la destrucción prácticamente completa de esta otra parte de la presa. Además las compuertas de los aliviadores no pudieron ser correctamente abiertas.






              Escrito por Mª. Carmen Chorda Domenech.

             Colaborador Jose E. Trigo Ferrer.

            Chiclana de la Frontera, 12/07/2019.



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